«No sabemos cuándo nos puede tocar a nosotros»

Yolanda se implicó desde el primer momento cuando conoció, de primera mano, el sentido de crear un colectivo como Lulacris. «Yo lo conocí de la mano de Silvia, que fue quien me habló de todo este movimiento, y posteriormente me presentó a Laura: me encantó el proyecto», afirma.

Aunque parezca que se trata de un problema social que pueda resultarnos lejano, «no podemos saber si algún día nos puede tocar a nosotros, aunque esperemos que no nos pille de cerca», desea.

«Yo tengo una niña pequeña y, además, me apetece mucho ayudarles y colaborar en lo que pueda», sentencia.